Iglesia de Chiu Chiu. Chiu Chiu - CHILE
El pueblo de Chiu Chiu se sitúa cerca de la confluencia del Río Salado con el Río Loa, en un oasis que en la época prehispánica concentraba gran cantidad de población atacameña, y que fue parte del trayecto recorrido por el Camino del Inca. El lugar fue tempranamente conquistado y evangelizado por los españoles, que fundaron cerca del asentamiento indígena la actual aldea, con el nombre de Atacama La Chica. En 1611 era ya una parroquia, bajo la advocación de San Francisco de Asís, dependiente del Arzobispado de Charcas (Alto Perú). El poblado se constituyó en el principal centro misional del valle del Loa.
La Iglesia de Chiu Chiu fue construida a mediados del siglo XVII. Su planta tiene forma de cruz latina, y la nave mide 27 metros de largo por 5 de ancho. Los gruesos muros son de adobe y tienen 1,2 metros de espesor. El techo es de una armadura ensamblada de chañar, algarrobo y cactus, para cuya confección no se usaron clavos sino amarras de cuero; sobre ella se colocó una gruesa cubierta de barro y paja.
El acceso central lo constituye una profunda bóveda, que se abre en todo el espesor de un macizo y enorme volumen rectangular que forma el frente del templo. La fachada principal presenta dos campanarios de piedra; fueron instalados en 1965 en el marco de una restauración realizada por la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, en reemplazo de uno de madera, puesto durante el siglo XIX, después de que los originales se derrumbaran. El ensanchado del muro exterior está escalonado y permite acceder a los campanarios y apreciar la cubierta de barro de la techumbre.
La iglesia se sitúa en un recinto amurallado dentro del cual hay tumbas. Se encuentra en el interior del templo bella imaginería colonial; destacan el Cristo crucificado que se saca en procesión y el cuadro de bifrontismo con la imagen de Cristo lacerado.