Estacion de Ferrocarriles de Copiapo. Copiapo - CHILE
Por la década de 1830 surgió entre las autoridades y empresarios nacionales el anhelo de contar con un sistema ferroviario, que modernizara el transporte permitiendo un mejor desarrollo de la economÃa. Gracias a la iniciativa de Guillermo Wheelright, norteamericano con intereses en el área naviera, se concretó el punto de partida de esta iniciativa: la lÃnea férrea entre la ciudad de Copiapó y el puerto de Caldera.
En 1841, Wheelright presentó al gobierno un proyecto para construir una lÃnea entre Santiago y ValparaÃso. El gobierno no contaba, sin embargo, con los capitales necesarios para la obra, por lo que Wheelright recurrió a inversionistas privados, que se comprometieron a financiarla. Este primer intento se vio frustrado por la crisis financiera que azotó a Europa a fines de la década de 1849. Wheelright vio concretado su sueño en la zona nortina, que por entonces vivÃa un gran auge económico basado en la explotación de yacimientos de plata, en particular de Chañarcillo. Acaudalados magnates de la zona lograron reunir un enorme capital, para tender una lÃnea cuya función principal serÃa transportar los minerales desde el interior al puerto de embarque. Los trabajos se iniciaron a comienzos de 1850, y el dÃa de Navidad de 1851 se realizó, en medio de una gran algarabÃa, el viaje inaugural del ferrocarril.
La Estación de Ferrocarriles de Copiapó se construyó en 1854, junto a un complejo que incluÃa bodegas, casas para el personal y otras instalaciones anexas. El edificio de la estación está conformado por dos volúmenes rectangulares; uno abierto, que corresponde al recinto del andén, y otro cerrado, destinado a las oficinas de administración y atención de público. Este último presenta una fachada simétrica con un cuerpo central de acceso que sobresale ligeramente; sobre este cuerpo, techado a dos aguas, se erige una torrecilla de ventilación con cuatro vanos rematados en arcos de medio punto. Un reloj corona el ingreso de la estación. En el interior los recintos se distribuyen a los costados de un gran hall donde están las boleterÃas. El volumen correspondiente al andén tiene como soporte exterior una hilera de pilares coronada por arcos de medio punto. La construcción es de madera, en tabiquerÃa de cañas y barro. Desde el punto de vista estilÃstico, la estación conjuga el neoclásico con el colonial americano.
El inmueble alberga hoy un museo ferroviario que da cuenta de este importante hito de la historia del transporte de nuestro paÃs.